En busca de establecer funciones, poderes, obligaciones y penalidades a los notarios puertorriqueños, la Comisión de lo Jurídico atendió hoy en vista pública el Proyecto de la Cámara 1050.
La medida, de la autoría del presidente cameral, Rafael “Tatito” Hernández Montañez, busca crear la “Ley del Colegio de Notarios de Puerto Rico” con el fin de regular esta profesión.
En su turno inicial, el presidente de la Comisión, Orlando Aponte Rosario resaltó que “el notariado puertorriqueño lo componen todos los notarios de Puerto Rico admitidos, y los que en adelante fueren admitidos por el Tribunal Supremo de Puerto Rico (TSPR) a ejercer dicho ministerio. Este disfruta de plena autonomía e independencia en su función, sujeto solamente en organización jerárquica al TSPR”.
A la audiencia pública compareció la directora ejecutiva del Colegio de Notarios de Puerto Rico (CNPR), quien favoreció el proyecto de ley, ya que este persigue obtener un reconocimiento de ley que le permita prosperar y perpetuarse, en beneficio del notariado local y de la comunidad en general.
Actualmente, para efecto del TSPR hay 8,000 notarios activos, y casi un 25 al 30 por ciento no tienen actividad notarial y “mensualmente rinden un índice negativo, es decir, tienen la profesión, pero no la ejercen”.
“De aprobarse el proyecto y convertirse en ley, los notarios no se verán obligados a pertenecer en el Colegio para ejercer su profesión, ni como requisito para obtener su admisión a la misma”, expresó la directora Virmarily Pacheco Rivera.
Pacheco Rivera aseveró que la medida en discusión no altera la jurisdicción del TSPR para reglamentar la función notarial, supervisar a los notarios y atender los procesos disciplinarios. “El TSPR atiende todos los asuntos reglamentarios y disciplinarios bajo el poder inherente que dicha rama de Gobierno tiene respecto a la profesión legal en Puerto Rico. En todo caso, la institución sin fin de lucro sería un estrecho colaborador del TSPR para adelantar intereses comunes”.
Por su parte, el representante Aponte Rosario sostuvo que la Comisión tiene un gran compromiso, incluyendo a la delegación del Partido Popular Democrático (PPD) y el presidente de la Cámara. “El presidente de la Cámara se reunió con este servidor, y me pidió que le diera más celeridad a los trámites de estos proyectos por el compromiso que tiene de colaborar con el CNPR”.
En cuanto las especificaciones del proyecto, la organización sin fines de lucro favorece la medida, ya que les da una visibilidad y los equipara con unas instituciones similares. “Ciertamente no afecta a otras instituciones ni a nadie que quiera crear otro gremio similar, pero ciertamente entendemos que el CNPR si amerita llegar a ese punto de rango y posición que otros colegios profesionales”, dijo el secretario del Comité del Colegio, Manuel Pérez.
Aponte Rosario adelantó que no ve postura negativa para que progrese la medida y la misma sea trabajada para que en que en esta Sesión Ordinaria sea aprobada.
Posturas en contra para reglamentar el negocio de bienes raíces
Con el fin de que ningún notario autorizado en Puerto Rico tenga que tomar la reválida y/o examen para ejercer como Corredor de Bienes Raíces en Puerto Rico, la directora ejecutiva del CNPR, Pacheco Rivera, expuso que “tal y como está redactada la medida, convierte al notariado en una profesión exenta de la aplicación de la Ley 10-1994”.
“Nosotros podemos advertir de situaciones, pero tomar una posición sobre si favorecemos o no la medida, es una cuestión de política pública que no incide en la competencia que tiene el notario”, añadió la Directora.
El Proyecto de la Cámara 1229, busca enmendar la Ley 10-1994, conocida como la “Ley para Reglamentar el Negocio de Bienes Raíces en Puerto Rico, con el fin de establecer que ningún notario autorizado a ejercer el notario, tendrá que tomar la reválida y/o examen para ejercer como Corredor de Bienes Raíces en Puerto Rico.
Por otro lado, la Asociación de Realtors de Puerto Rico señaló que “otorgar una licencia sin tener que demostrar al Estado ni a las agencias reguladoras para el desempeño de sus funciones atenta en contra del proceso de ley”.
El corredor de bienes, Milton Serrano, manifestó que los notarios en derecho tienen la preparación de cinco de las 25 materias mínimas requeridas del curso preparatorio para un corredor de bienes raíces, que representa un 20 por ciento del total de las materias.
El proceso para obtener una licencia de bienes raíces o corredor conlleva un curso preparatorio de 90 horas y luego una reválida preparada por la Junta de Corredores, Vendedores y Empresas de Bienes Raíces de Puerto Rico adscrita al Departamento de Estado (DE). Uno de los cursos que se le requiere al Corredor es matemáticas en bienes raíces, contribuciones, calificación y permisos, entre otros.
En cuanto a las 25 materias, Orlando Vázquez – Corredor de Bienes Raíces resaltó que los cursos preparatorios fueron establecidos por la Junta de Corredores de Bienes Raíces adscritos por el DE. “De esos 25 cursos, cada uno comprende tres horas, pero cada materia dependería, ya que hay algunas que requieren seis o siete horas”.
Sobre este proyecto de ley, el legislador Rosario Aponte señaló que una medida como esta, posiblemente no se puede aprobar. “Esta Comisión tiene autoridad para enmendar el mismo para que no haya duda”, concluyó.